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Caleidoscopio

La pasarela del cielo



Otra mañana se acerca 
tan hermosa como todas, 
tan irrepetible...

Y llama la mañana al cristal de mi ventana
con la aldaba de sus trinos, se me acerca
 única y diluida en su caleidoscópico cifrado de emociones... 

Y desde lo infinito nos mira el cielo, 
tan alto y tan lejano como una  fuente de luz,
inmenso...

 Aquí a mi lado amaneces tú,
 accesible y cercano, 
tan sereno por fuera y por dentro, 
tan oscuro y profundo como el pozo
 que se abre en la honda base del mundo
y que quizá guarde fiel su secreto...


Bouguereau


El tiempo no parece transcurrir, y nos ve pasar impertérrito, impenitente e impúdico por sus pagos, hasta el agotamiento más cruel. 

Sé que a la hora de la extinción nos mirará acabarnos con los ojos secos... 

Y alumbrarán nuestras agónicas metas la bóveda de sus atardeceres, y puede que otra magnitud aún mayor que él mismo, le vea pasar por los pasillos fríos y vacíos, atemporales y tétricos del universo.

Quizá o quizá no, sólo estemos nosotros dos en este universo plagado de una multitud de seres irrelevantes en nuestro argumento rosado al anochecer, y violeta al besar el sol las alturas del cielo.

La ventana

El prado de Proserpina


Llama a mi ventana 
la luz que se traga el miedo.
 Llama el sol aun fresco,
 llama la paloma blanca...


Gottfried Helnwein

Los gorriones hacen círculos concéntricos, dibujando el mapa oculto en el laberinto de mi pecho, y las golondrinas los siguen muy de cerca para cruzarse y cruzarse en una danza de dicha desconocida y llamada incierta...

Es el alba que la noche cesa. Es el sueño vivo que aguarda impaciente tras la ruda puerta, es el miedo sepultado bajo el azul del cielo intenso y el canto es, del viento sobre las flores frescas...
Y les sigo con paso primero incierto y que luego busca su regazo en ligera carrera...

Y es que la vida llama y la muerte cesa;
 y llegar, llegará el segundo que trasmute el perpetuo ciclo, mas primero se han de despegar alto las alas que dobladas tras de mi espalda...
a ti te esperan.


Noten

El prado de Proserpina






Mejor no esperar, no esperar nada...

Mejor tomar,
 tomar el sol a sorbos, 
el viento tomar con sed insaciable 
y en copa de tallado cristal.
La piel amante gozar como cereza brillante,
 el alma y el cuerpo abrazar,
 la una intangible y tan cerca,
y el otro tangente,
 secante y tan distante...

Flores que no permanecen 
y en volandas se deshojan 
en pos de postergados amores...
 Aguas tranquilas que guardan
 la esencia misma del misterio, 
indecisos pajarillos de inocencia...
 Sombras de estío, acogedoras,
 del invierno húmedas prisiones,
 todos noten, todos oigan, 
que vivir es un sólo trago 
para tomar en copa alta y frágil,
 sujeto al tiempo con labios prietos
 y temblorosas manos...

Colgada del cielo

El prado de Proserpina



Incertidumbre, 
camino partido, camino robado...
Meta en el cielo, 
destino olvidado...


http://tophinhanhdep.net/44-hinh-anh-girl-buon-anh.html




No sé qué hacer si no me acompañas, 
no sé qué debo hacer si no me nombras,
 tú que diriges los sueños, 
olvidaste el mío que no tiene sombra.

¿Qué he de hacer en la soledad de la noche 
si no discurres mis paisajes?
 ¿Qué he de hacer si no te paseas por mis sueños, 
si ya no amainas mis pesares?

Qué, luna redonda, 
burbuja bella del silencio...
 ¿qué será del principio y del fin
 si no puedo alzar el pensamiento
 y verte a ti existir, 
colgadita del cielo...?



Me reinventas...

Esse Imaginaria



Se acerca pensativa el alba,
asoma su secreto futuro por mi ventana,
 llamando a las luces dormidas de mi alma
con su sorpresa eterna,
y su futuro colmado de mañanas.

BeautifulBurden
© Jennifer Healy


Se acerca llamando fuerte
 a las puertas de mis párpados pesados y sin ganas...
No me necesitas, amanecer dorado,
pero requieres mis ojos torpes
 para verter sobre ellos los vírgenes brotes
 de tus recién nacidos rayos
de cálido oro 
y frío nácar.

Y me inventas y te reinventas,
ciclo a ciclo redibujado...
Y cada día llamas a mis puertas
 con tu sin fin dorado,
con tus reflejos amarillos,
 con tu mar enamorado,
 y tus nubes rosas y azules
que prenden en llamas
las mojadas almohadas del pasado.

Luna afrutada

Esse Imaginaria


Viene la luna, 
alta y redonda, 
a traer a mi ventana
 tus ojos ausentes, 
tus manos blancas.


Amandine Van-Ray



 Viene la luna, 
subida a los cielos rasos, 
viene cargada de sueños nuevos
  de viejos milagros.

 Con tus ojos me mira,
 con tu voz me habla,
 no importan las ausencias sin vida, 
colgada a su esfera,
 burbuja de plata... 

No hay distancias, 
la reina del cielo las rompe, 
serena, móvil e inmóvil, 
meiga que aniquila el tiempo, 
el olvido y los rencores.

Vino esta noche
 con su vestido ámbar, 
dulce y amarga, 
perfecta bailarina del silencio y del tiempo,
 sultana callada de dulzura afrutada 
y secretos amores.

Trae para mi su alforja de sueños, reconfortantes caricias invisibles que tras mis párpados inventan el cielo. Y baja poco a poco y suavemente su esfera mágica sobre las mágicas aguas, y se refleja y me seduce como bruja dorada, corazón de plata...Y al fin besa el mar en un beso infinito de trascendente paz, y se hace el alba, vástago cíclico y por siempre recién nacido de su mágica coreografía de cristal.

Sospechas

Esse Imaginaria



Dejaría de elucubrar si el mundo se parase, acaso mi mente se quedase en blanco, acaso se nublase, pero el mundo gira y la mente vuela, y los problemas pululan y las sospechas, brujas ellas siempre, siempre sospechan.

Stefan Gesel

Tristeza, aburrimiento, apatía.. ¿acaso existe eso si no es en un cuadro pintado con desgana o en un mal verso? ¿acaso es posible no hacer nada cuando la nada misma ya es cóncavo y oscuro suceso?

Cada día la gravedad precipita una vencida legión de lágrimas sobre el suelo, cada vez que alguien calla, cada vez que se levanta en armas el estrepitoso silencio...

Cada día, entre el fango y el frío se debaten aquellos refugiados, porque no terminan de tener el refugio que les nombra, callados, hundidos, escondidos de la vista para que sus estampas no estorben la conciencia de hielo del iceberg maldito de la raza hombre...

¿Dónde están escondidos, dónde los ancianos enfermos y cansados, dónde los niños que no encuentran  techo, dónde que ni tan siquiera se oyen sus lágrimas caer cada mañana en escandaloso silencio??

Lloran callados, mueren con miedo, aplastados por el olvido y la incongruencia de llamarse refugiados sin haber hallado suelo.

¿Dónde están las almas, dónde están los cuerpos? sé que un día su polvo postrero encontrarse podrá con el mío, en el caprichoso remolino del viento...

Dejaría de elucubrar si el mundo se parase, acaso mi mente se quedase en blanco, acaso se nublase, pero el mundo gira y la mente vuela, y los problemas pululan y las sospechas, brujas ellas siempre, siempre sospechan.





El amor

Esse Imaginaria

Amor, la palabra que no es palabra...

La más vendida...
la más comprada, 
la más mentida y aunque 
 verdadera o falsa,
incombustible consumada...


Matías Sterner


Amor en el viento hay
 y en el llanto.
 Amor en los ojos 
y en las manos. 
Amor en los burdeles,
 traicionado...
 En las manos de la madre es 
y aún en las del hijo abandonado...

Dios del hombre, 
y del mismo hombre diablo...

Amor perdido, 
amor buscado, 
inventado, mal dibujado,
 y detestado...

Y los poetas... 
los poetas riman besos sin cesar... 

Riman sueños, besan cielos, 
abrazan silencios que rezan letanías 
de amores de mil colores 
sin solución de continuidad,
curtidos de cien sabores
 y sinsabores.

Pero siempre fueron los cariños pequeñitos los más claros, 
mientras que en las cavernas más oscuras reptan húmedos y lentos los amores que enlazan los cuerpos,
 los de todos soñados.

Amor, 
el que se encuentra sin haber buscado, 
que se pierde si perseguido, 
tal colibrí de capricho encaprichado
que cultiva el candor.


Ksenia Muza



 Dulce hiel,
 escasa ambrosía,
 ego entregado
ser del revés.



Escribiendo...

Esse Imaginaria



Necesito un lugar oscuro para entender la luz; un papel en blanco para comprender las palabras, tu mirada para deleitarme en tu ausencia y tu ausencia sin sombra necesito para conocer tu ser tal como se conoce la vida sobre el revoloteo de unos pájaros en la mañana, tal como se aprecia la muerte cuando es cálida y necesaria...


A. M. Lorek

Y ese papel cuando está vacío se me ofrece como un vergel fresco y verde, repleto de flores blancas y animalillos que corretean sin orden aparente, inmersos en la absoluta armonía del caos que me reclama. 

Un sueño... Cuando despierte de este sueño quizá haya algo, quizá no haya nada... ¿Cuando despierte es posible que exista algo de lo que he soñado??
Paso la vida durmiendo y escribiendo sobre las nubes... Al fin mi existir es realmente un sueño, coronado de una alta luna, coronado de estrellas, tangente de los cantares limpios de la fuente clara que para mi sola entona cercanas, inquietantes y hermosas serenatas nocturnas que alumbran el camino de mis zigzagueantes  ilusiones casi, casi abandonadas.
A veces, subida en alguna de estas oníricas ilusiones creo estar viva, ¡y sé que lo estoy...!!! pero pronto tomo conciencia de mi inconsciencia y de la inconsistencia de tales espejismos; entonces es cuando la luna me mira como de soslayo, entre burlona y confidente, y se ríe con su sonrisa inclinada sobre el azul oscuro casi negro del anverso de mis párpados nublados e inquietos.

Al fin la vida para mi es un sueño encadenado a otros sueños más pequeños, una sucesión de intentos y de esperanzas, de fuerzas sobrehumanas empleadas en encender las ascuas agonizantes de mis deseos. Al fin pasaré la vida en cualquier lecho de flores secas, soñando un mundo casi real, dibujando en mis lienzos rostros casi vivos que gesticulan intrincadas emociones, como un gepetto.


Ocaso

Esse Imaginaria



Nunca supe de qué está hecho el tiempo, ni la distancia, qué materia sostiene los recuerdos... Acaso sepa algún día, cuando el tiempo desaparezca tras el último segundo, cuando la distancia se extinga produciéndose en su ausencia el abrazo eterno, y cuando la memoria se disipe tras el último recuerdo...

Amelia Fletcher


Acaso entonces, perdida la mirada en el vacío y las manos frías y sin dueño, ese día en que sólo aparente una cáscara vacía en el suelo, acaso entonces sepa de qué están hechos cada uno de los misterios...
Amores lejanos, ya no más tras tanto y tanto tiempo, ya sólo tiempo y tiempo desorientado y disueltos en el café de la mañana todos mis recuerdos.

Madre

Esse Imaginaria





Hoy te escribo, madre... 
Primer domingo de Mayo. 
 Te traigo flores, jazmines, geranios y azahares, te los traigo porque no tengo ni nunca tuve cosa más bella que entregarte, madre...
Te quise y te quiero, te extraño y te lloro y tu presencia ausente es un agujero cada vez más profundo que mis recuerdos colman cada día de interminables lágrimas, como se colmara de alhajas un tesoro.
Madre, navego sobre el océano que vierten mis ojos, 
y desde que te fuiste no hay motivo para que mis labios finjan sonrisas ni para que mis manos se crean palomas del cielo ni gorriones tordos.



Madre, lo que fuiste yo lo sé: ángel, mujer, extraña criatura de fulgurante blancura, ninfa, hada, o quizá simplemente tú, una mujer buena y bella, un rayo de sol que cruza la estancia, un trino, un reflejo en el agua de la fuente, un aroma de azahar en el recuerdo tallado a fuego sobre mi piel y mis ojos desbordados de tu pasado que a cada amanecer añoro.
Aquí estoy, tú no estás... 
 Construyendo inútilmente una balsa para cruzar el océano salado de tu recuerdo, dulce almíbar del apetecible puchero de tus rastrojos.

Ángeles borrachos

Esse Imaginaria




A veces pensar es bueno, a veces pensar es malo. 
Algunas veces se mata con el pensamiento o el sentimiento termina matando, y otras sin querer se hiere por no haber pensado.






Da igual,
 la vida está siempre ahí mirando, 
mientras dura, mientras hiere, 
mientras sueñes que vives
mientras sabes que mueres...

Mientras sueñas, respiras,
 y si olvidas el camino de la luna 
y los aromas de los nardos, 
entonces, desgraciado, 
entonces tu corazón será tan sólo 
 el fabuloso alcázar del llanto.

Sueña, imagina, vuela,
 comete mil cien maravillosas locuras, 
piensa y no pienses...

Desequilibra tu balanza y abraza siempre fuerte contra tu pecho desbocado todos los castillos del aire, los ángeles, los demonios y las nubes vaporosas y endebles que dibujan las hadas y los duendes cuando están borrachos.